Nunca la musicalidad latina tuvo tanto auge. La toda poderosa Europa y el no menos poderoso E.U.A. se rindieron a esta música que hasta entonces era estricta a limites geográficos que no permitían vuelos mas altos, públicos mas numeroso.
Resistiendo en mostrar esa musicalidad “Raíces de América” incorpora exactamente esta latinidad hoy solicitada con avides por astros y plateas de cuatro continentes. Formado por brasileños, chilenos y argentinos, el grupo acaba siendo un retrato fiel de una autentica expresión musical y emotiva latinidad.
Colocando elementos como folklor, a fusión de generos, estilos e interpretación peculiar, “Raíces de América” con su trabajo sério y contundente llega a miles de personas que nunca se cansan de verlos en acción, principalmente através de sus concurridos shows.
Por eso con toda razón que el público se viene multiplicando entre un espectáculo y otro. No solo en territorio brasileño, sino también en otros parages mas alla del mar. La firme acentuación latina de la música mostrada por “Raíces de América” no quere decir que el grupo este desconectado del mundo actual.
Su contemporanidad esta evidente, en un repertorio que mezcla manifestaciones de varios pueblos en varias épocas. Al mismo tiempo en que revive de manera emocionante la linda “Volver A Los 17”, ataca con “Cio da Terra”, o estremece con la interpretación profunda de “Rosas de Hiroshima”. En fin “Raíces de América” es el resultado del sentimiento de una América Latina paradojal, donde paz convive con guerra, donde el bién infelizmente en dosis pequeñas esta al lado del mal, donde la corrupción, la riqueza de unos pocos contrastan con la franciscana pobreza de la mayoria.
Un viaje musical es lo que siempre ocurre cuando los brasileños, chilenos y argentinos de “Raíces de América” ocupan un escenario para un espectáculo donde, con certeza, nunca falta emoción y siempre sobra talento. Embarcar en esa aero-nave es más que una distracción, es el mas puro placer de sentir la sangre correr caliente por las venas y hacer latir mas fuerte el corazón. Latinamente!
José Sebastião Pinheiro